Sucedió en la comisaría 35 de la ciudad neuquina de Rincón de los Sauces. Por el hecho, el párroco es investigado en una causa por tenencia y tráfico de estupefacientes.
No hay dudas de que a veces la realidad supera a la ficción. Una muestra de ello es lo que ocurrió el último viernes en Neuquén, cuando un cura llevó marihuana a un preso dentro de un pote de dulce de leche.El hecho tuvo lugar en la Comisaría 35 de Rincón de los Sauces, donde un cura fue a visitar a un detenido con la intención de llevarle alimentos.
De acuerdo a lo que establecido por el protocolo de seguridad, se realizó una revisión rigurosa de los objetos ingresados para ser recibidos por los internos. Fue en ese momento que un oficial descubrió algo sospechoso dentro de un pote de dulce de leche.
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Así, en dicho recipiente con dulce de leche se advirtieron indicios de una presunta manipulación, lográndose identificar enseguida envoltorios de nylon y 10 papelillos. En total, eran 43 gramos de cannabis sativa, informaron las fuentes policiales. La droga fue inmediatamente incautada y enviada al laboratorio para confirmar su autenticidad.
Ante semejante descubrimiento, el cura afirmó que los alimentos que llevaba no eran suyos, sino que se los había entregado otra persona. Pese a su explicación, las autoridades policiales ahora lo investigan por su presunta implicación en un caso de tenencia y tráfico de estupefacientes.